Durante el reciente Hackathon de Innovación Sanitaria, un grupo multidisciplinar formado por profesionales de enfermería, ingeniería, psicología y gestión sanitaria participó en el desarrollo de un borrador de propuesta orientada a mejorar la atención en salud mental a través de la interoperabilidad y el acompañamiento digital humanizado.
El proyecto, actualmente en fase de conceptualización, surge de una reflexión compartida:
¿Cómo podemos hacer que el cuidado en salud mental sea más continuo, conectado y humano?
A partir de esta pregunta, el equipo trabajó en una idea preliminar centrada en mejorar el flujo diagnóstico y terapéutico, y en crear nuevas herramientas digitales que faciliten el seguimiento del paciente y la coordinación entre niveles asistenciales.
La propuesta busca avanzar hacia una salud mental más integrada, donde la tecnología acompañe —sin sustituir— la relación entre paciente y profesional.
El grupo ha puesto especial atención en el valor ético del dato, la interoperabilidad responsable y la humanización del cuidado digital.
“Más que una aplicación, estamos explorando un modelo de conexión que escuche, acompañe y genere continuidad en los procesos de salud mental”, señalaron los miembros del equipo.
El trabajo continuará en los próximos meses con el objetivo de validar el enfoque y definir un prototipo colaborativo que pueda aplicarse en entornos reales, con impacto positivo tanto para pacientes como para profesionales.
Esta experiencia forma parte del compromiso continuo del equipo por innovar desde el cuidado, impulsando proyectos que combinen ciencia, tecnología y sensibilidad humana.
Una exploración que demuestra que las mejores soluciones nacen del trabajo en red.
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